domingo, abril 30, 2006

La felicidad

La gente no es tan feliz como parece (seguramente tampoco tan desgraciada). Hoy lo constato una vez más. Eso, no es que me consuele... pero me hace sentir normal, dentro de la norma, quiero decir, de lo usual, de lo que se acostumbra, menos marginal, encantadoramente vulgar.
Alguna vez creí estar tocando la felicidad con la punta de los dedos y tal vez la toqué. Raros momentos en los que eres consciente de que tienes todo lo que deseas... pero son tan efímeros como escasos... y enseguida te percatas de que no, que lo que te hace sentir tan bien va a durar poco o te va traer un sinfín de complicaciones (que seguramente te harán infeliz)
Me dijeron, una vez, que la felicidad se vive en pasado. Y estoy de acuerdo. Sólo después de un tiempo comprendes que lo tuviste todo, todo lo que, entonces (y ahora, también), te gustaría tener (evidentemente no me refiero sólo a lo material). En el ahora... lo tenemos difícil. Siempre hay algo, que añoramos, deseamos, esperamos... que nos impide disfrutar de lo que tenemos. Por mucho que tengamos.
Soy nefasta citando y con toda seguridad arruinaré la cita de Atxaga, pero, en su libro de Obaba, dice, más o menos, que la vida es como la fiesta de un pueblo dónde los que están dentro del bar se mueren por salir... y los que están en la plaza sólo desean poder entrar en él. Hasta ahí Atxaga. Ahora yo: Cuando estamos solos, vemos las ventajas de vivir con alguien. Cuando tenemos pareja echamos de menos el vivir solos.... Y así con todo. Lo bueno es, constatar, durante un momento de lucidez, que todos somos encantadoramente vulgares.MJ

jueves, abril 27, 2006

Miércoles

Un miércoles más. Mis amigos, (ya nunca los amigos de mis amigos) y yo, nos volvimos a juntar. Otro miércoles y hasta muy tarde. Es increíble lo rápido que pasan cinco horas, cuando en el colegio, a veces, se hacen eternas.
Hoy, nos reímos de la política, de la religión, de las reglas... creo, que no lo sé muy bien, también del amor, del desamor???. De todo lo que sujeta la vida, para liberarla y dejarla un poco suelta. Terapia psicológica lo llamarían algunos. Y nos cobrarían un pastón la hora, bueno... pasta gastamos, pero se la damos al del bar y nunca a un psicólogo, que no es lo mismo. Y él, sigue sin hacer uso de su "derecho de admisión". Tal vez algún día.
Nos reímos.
Seguimos haciendo uso de los juegos del lenguaje, y renombrando (quiero decir volviendo a poner nombre) las cosas cotidianas, por ejemplo, para mí ya nunca más el hilo dental volverá a ser hilo dental... y una auditoría, venga de donde venga, siempre irá unida al nombre de Tomás y de Laínez (jejejejejej, aún sigo un poco impresionada por la guindilla, pero creo que será mi nombre de guerra) y de Moreta, claro.
Nos reímos.
El juego de los refranes sigue coleando (ver el anterior post "los amigos de mis amigos") y el mejor chiste de la noche me hará reír varíos días... y más, creo. Y no todo es fruto del alcohol, (y yo no le quito mérito, eh?), pero se nota que estamos a gusto, unos por unas razones otros por otra, que seguro que no coinciden, espero...
Creo que hoy, por fin, aterricé de Egipto, y ya estoy preparada para lo que la vida me va dando, (joder!!! mierda!!!!), bueno, aún no del todo... paciencia... pero lo voy a ir consiguiendo... si seguís dándome vuestros miércoles.
Nos reímos.
Qué suerte esto de tener amigos!!! MJ

viernes, abril 21, 2006

Y ahora...

¿Y ahora qué hago yo?
Permitiste que oyera lo que no dijiste, que viera lo que tú querías, que alcanzara en mis sueños lo inalcanzable.
Para arrancarlo de golpe, bueno, de golpe no, que, a veces, aún, mis oídos te oyen gritar lo irrealizable y mis ojos te ven enamorado y tu boca me pide un beso imposible y me entregas tu alma inaccesible.
Para arrancarlo suavemente, poco a poco, que aún duele más
Y ahora, ¿qué hago yo?. A quién dirigiré mis palabras, dónde enfocaré mis miradas, cómo nacerán mis sonrisas... en qué ocuparé mis sueños ¿?.MJ

sábado, abril 15, 2006

EGIPTO

Tengo que escribirlo, tengo que sacarlo de dentro a fuera, en definitiva, tengo que revivirlo... La cantidad de cosas que debo hacer me llaman ("venga, organízate, venga lava, coloca..."), pero no puedo, tengo que escribir.
Primero, y ante todo, para tener un buen viaje es necesario buena compañía, y la tuve, la mejor. Por eso me cautivó Egipto, porque estuvieron ellas allí para vivirlo conmigo.
Segundo, Egipto mueve todos y cada uno de los sentidos de los que cada uno dispone (miramos, tocamos, olemos, oímos, gustamos), pero en conjunto emociona, conmueve, revuelve (en el buen sentido). No es sólo lo que ves o tocas, es lo que sientes, lo que impresiona hasta llegar a emocionar.
Tercero, me encantan los egipcios, en el más puro sentido del verbo encantar, hechizan, sobre todo los hombres, porque claro, las mujeres están en casa, ocupándose de la familia (no todo iba a ser positivo, pero es que ahora lo negativo de este pueblo prefiero no verlo, debe ser que sigo bajo el poder de alguna pócima). Guapos, con buen porte, simpáticos, te hacen la vida agradable, zalameros... pero tan divertidos. Sólo unos minutos hablando con ellos y la risa surge suave y natural.
Cuarto, no voy a hablar de Abú Simbel, ni de El Cairo, ni del Nilo... tal vez en otra ocasión... Pero sí de lo bien que volví, a pesar del cansancio y los madrugones, de lo contenta que estoy... Salamanca y las tristezas y los agobios y los lamentos y la desazón...quedaron tan lejos durante siete días. Claro que me hubiera gustado compartirlo con otras personas, claro, (Ware, Any y Manolo, por ejemplo). Pero me olvidé de todo, en serio, de todo. Viví y lo hice con alegría. Volveré.MJ

jueves, abril 06, 2006

Un mal día

No duermes nada. Pero nada de nada. Y a tu madre no se le ocurre mejor explicación que eso es porque algo te preocupa. ¡Pero si no hago nada! ¿cómo voy a estar preocupada por nada? También está el amigo que te dice que de qué te quejas, que no puedes estar cansada, porque en esta sociedad de vagos nos quejamos por gusto, porque nos pasamos todo el día tirados en un sofá y no hacemos ni el ejercicio de ir andando hasta clase. Pero eso tampoco valía, vas y vuelves a pata. Así que ahora, además de no dormir, me paso el día comiéndome la cabeza pensando qué me preocupará y si debería ir corriendo en vez de andando.
Llegas a clase a las 8 de la mañana y una portuguesa a la que no entiendes nada de lo que dice te da una clase magistral de dos horas. ¿he dicho ya que tenía sueño? Consigues acabar el resto de las clases sin demasiados incidentes, pero con un aburrimiento infinito sumado a tu también infinito sueño.
Ya en casa miras a ver si MJ te ha regalado un post hoy, pero nada, y piensas que ya va siendo hora de romper su monopolio (:D), así que te pones un ratillo a ver qué sale...
Pero no pienses en dormir después, que hay que ir a hacer la comida. ¿Y después de comer? Tampoco, que tienes que ir a las prácticas del coche. Y si ayer que dormiste algo más y mejor casi atropellas a un pobre inocente, ¿qué no serás capaz de hacer hoy?
Bueno, pues cuando acabes... ¡No! Alguien en algún momento te puso la cruz de tener que hacer compañía a la mujer más aburrida del mundo, que además de aburrida es oportuna, y además de todo eso te hace ir al cine a ver Ice Age: el deshielo. (Sé que esto no debería comentarlo aquí en público, pero tengo que justificar mi desesperación.)
Los planes al salir del cine son ir a casa, ducharte y cenar, porque viene un amigo de fuera, y le has dicho que lo sacabas de fiesta. Bueno, en principio no lo sacabas de fiesta, un montón más de gente y tu lo sacabais de fiesta, porque bueno, no es que tengas con él la mejor relación del mundo. Pero entonces, lo que parecía un plan algo bueno después de ese largo día, como no, se torna mucho menos apetecible cuando todo ese montón más de gente por unas cosas o por otras resulta que ¡no puede salir esta noche! Voy a pasarme la noche con un amigo al que veo una vez al año y con el que me cruzo 4 frases y con otro tío que le acompaña al que ni siquiera conozco. Apetecible, ¿eh?
Y de estudiar ni hablamos, claro.

Y es que yo sé que para pasárselo bien, uno tiene que poner de su parte, pero es que me lo ponen demasiado difícil...

lunes, abril 03, 2006

Cosa de dos

Va... Venga... al menos no te enfades. Si te hablo... te parece mal, si no te hablo... me parece mal a mí. Pero ni siquiera tiene la importancia que le doy. Es mi forma de ser, brusca, excesiva... es la tuya, pausada, un poco ausente... ninguna de las dos reales, sólo aparentes.
Si pudiera volvería al principio (casi más por tí, que por mí, pero lo haría), nada sería entonces como es... pero en la peli, que vi el otro día, decían que "el mayor riesgo en la vida es no correr ninguno" y creo, que a esto... yo sí que me apunto. MJ

sábado, abril 01, 2006

Castillos en el aire

No hay mayor desesperación que la de no esperar nada. Cuando ya, ni las miradas te hablan.
Es cierto que puede que nunca hablaran, que todo estuviera en mi cabeza y, cuando soy consciente de ello, es cuando se quedaron mudas del todo.
Seguramente lo inventé todo, las sonrisas, las miradas, la complicidad... Creé una historia unilateral. Es mi especialidad. Lo hago increíblemente bien. No es la primera vez y me temo que no será la última. Sueño, imagino... y luego soy incapaz de desligar lo inventado de la realidad, cuando, ambas cosas, están a años luz una de la otra.
Un amigo me ha dicho, que, esto, es lo que nos permite darnos cuenta que estamos vivos. Coincido con él... hasta un cierto punto, aquel en el que me encuentro ahora, en el que me encontré tantas veces y me encontraré en el futuro. El momento exacto en el que se comprende que todo es un cuento, bien tramado, por uno mismo.
Y me remito de nuevo a mi amigo, entonces... en ese punto justo, es cuando te das cuenta que realmente estás muerto. MJ